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FRUTAS  PARA  PERDER  PESO

Las frutas, dado su contenido en agua, son ideales para adelgazar y eliminar las toxinas que acumula nuestro organismo pero, existen determinadas frutas que potencian más la pérdida de grasa, volumen y peso de determinadas zonas del cuerpo.

La acumulación de grasa en el abdomen es una de las preocupaciones más extendidas a la hora de la pérdida de peso y, aunque siempre recomienden la práctica de deporte, tenemos que tener en cuenta que, antes de endurecer debemos eliminar la grasa que no deseemos. Para eso debemos incluir determinadas frutas en nuestra dieta.

CÍTRICOS: Las toronjas, mandarinas, limones y en particular las naranjas ayudan a reducir el colesterol (grasa en sangre) y aceleran la eliminación de grasa del cuerpo gracias a su contenido de vitamina C, lo que conlleva a la pérdida de peso. Además, la naranja tiene un poder saciante que nos ayudará a no picar entre comidas.

MELÓN: Su alto contenido en potasio regula el sodio de nuestro cuerpo evitando las retenciones y la sensación de hinchazón.

PIÑA: La piña es una de las frutas más conocidas por su poder diurético. Además es una fruta rica en vitaminas y minerales.

PERA: La Pera es una fruta que elimina los líquidos de nuestro cuerpo. Para la retención de líquidos lo ideal es consumir pera, ya que el 80% de su composición es agua y, contiene muy poca grasa. Es rica en potasio, magnesio y calcio, ideal a la hora de hacer dieta.

LECHOSA: Es una fruta tropical con un alto contenido de vitamina C, vitaminas A y vitaminas del complejo B, ya que casi el 90% de su composición es agua,  la lechosa nos ayuda a eliminar toxinas del organismo.

MANZANAS: Las manzanas, comiéndolas con piel hacen que su ingesta queme la grasa. Se conoce como un alimento quema grasa natural perfecta.

KIWI: Esta fruta contiene propiedades depurativas, saciantes y antioxidantes que permiten al organismo quemar grasas más rápidamente y perder peso en forma natural. El kiwi es una fruta que posee un alto porcentaje de vitamina C, antioxidante natural que mejora el metabolismo celular, aumentando el gasto metabólico y por ende, la quema de calorías.